In cook we trust
Voraz ha cambiado de ubicación, eliminamos la descripción del local hasta la próxima visita.
La cocina se basa en sabores tradicionales re-elaborados con presentaciones muy diferentes y casi me atrevería a denominar a sus platos con la palabra trampantojo. Por la presencia de esos sabores de nuestra infancia, incluso las personas más reacias a este tipo de cocina creo que pueden disfrutar bastante. En la página web define su cocina como de sabor, sabor y sabor y puedo asegurar que así es incluso en algunos de los platos me pareció que había demasiada potencia, pero … también tiene que haber equilibrio entre los elementos del plato.
Carta de vinos no demasiado grande y dónde prácticamente todas las referencias son bastante alternativas qué es posible que acompañen muy bien algunos platos pero donde el comensal menos atrevido tendrá dificultades de elección.
➕ Factura limpia, solo se cobra aquello que el comensal ha pedido.
➕ El servicio fue perfecto, incluso diría que fue más que perfecto no es fácil encontrar personal de sala que cuando te preguntan qué te ha parecido y no les dices que bien, tengan interés en escucharte. Después de decir que algo no nos había acabado de convencer siguieron preguntando y se esforzaron en que salieras realmente satisfecho.
➕ El local y el entorno son muy acogedores.
➕ Tienen una especie de guardarropa para que las prendas de abrigo en invierno no andén colgando de las sillas. Bravo ?.
➕ Nos ofrecieron un vino blanco y como al probarlo no nos acabo de convencer se lo llevaron sin ningún problema y nos propusieron otra botella.
➕ Cambio de platos y cubiertos. Nos estamos acostumbrando a que nos traten tan mal en este aspecto, que cuando nos tratan correctamente nos sorprende.
➖ La carta de vinos con referencias más tradicionales y más posibilidades por debajo de 20 €; creo que los precios de los vinos tienen margen de mejora.
➖ Quizás poner un poco de pan estaría bien, lo eché de menos.
➖ Sí solo tienes dos menús de degustación, deberías tener la página web al día.
🗨 Las mesas altas son muy cómodas y agradables.
Viernes a mediodía y después de haber leído las opiniones de 2 personas en las que confío plenamente en este tema (Rosa V. y Toño P.) decidimos acercarnos a probar su cocina. No tiene carta y ofrece dos menús de degustación de 8 y 14 por 38 y 46 € respectivamente, sin incluir la bebida.
Nos decantamos por el menú largo e invito al lector a que mire las fotos, pues son platos difíciles de describir con palabras. Aunque en el restaurante no hacen ningún tipo de separación o distinción entre los distintos platos, por comodidad y facilidad de lectura yo la voy a introducir .
Como se verá a continuación, un homenaje en toda regla, un sitio muy recomendable y dónde estoy deseando que cambien el menú para volver y probar nuevas cosas.
─ El coste de esta comida fue de 62€ por persona todo incluido y de 46€ por persona sin incluir las bebidas (vino, agua, cafés, cervezas, refrescos, copas…).
Todos nos parecieron excelentes y si alguno debo destacar es el vermut y el soparet alicantí
Papas, boquerones en vinagre y vermut ❤️⭐️
Pizzeta crujiente de salazones ❤️
Soparet Alicanti ❤️⭐️
Capuchino de dashi e infladita de algas ❤️ Muy original.
Zarzuela fria de pescado ❤️⭐️. Sabor y equilibrio.
Lechuga, vieira, sobreasada y misho rojo ❤️️ el plato me pareció buenísimo pero como se parecía en la foto la cantidad de sal que pusieron de decoración era excesiva y el plato estaba en su conjunto demás de salado. No es un único caso, hay que tener mucho cuidado con esto en cocina.
Arroz con costra ☑️. Estaba muy bueno pero demasiada potencia el sabor de la morcilla, se imponia.
Tartar de calamar y su guiso ☑️. Igualmente sabores demasiado potentes para mi gusto, pero la textura del calamar, guau…
Cordero en su jugo y setas ❤️⭐️. Una autentica pasada.
Los dos postres magníficos, merece la pena pedir el menú largo para no perderte ninguno, pero si debo elegir uno, por lo original, las granadas.
Granadas ❤️⭐️
Natas con Fresa ❤️⭐️
─ De aperitivo pedimos un fino (1 x 4€) y no sirvieron una copa de CB Alvear, que me gustó bastante, tenía un puntito de pasificado muy sutil.
─ Gaia Verdejo (1×26€). No soy muy amante de esta variedad de uva pero este vino mira bastante aceptable aunque me sorprendió menos de lo que Jorge (sala) me había dicho.
─ «Sin prisa«. Pedimos una copa de vino tinto para acompañar la carne y nos ofrecieron este que me gustó (sin entusiasmo) y qué compañía muy bien el intenso sabor del Cordero.
─ Néctar, un Pedro Ximénez para acompañar los postres.
🗨 Cuando vuelva eligiré otro vino para el postre ya que estos son muy sutiles y el Pedro Ximénez muy potente.